RIVERA/ URUGUAI- (Texto em idioma espanhol ) - El 1 de diciembre quedará marcado como una fecha bisagra para el norte del Uruguay. Ese día despegó el primer vuelo directo entre Montevideo y Rivera, operado por Paranair, inaugurando algo más que una nueva ruta aérea: comenzó un antes y un después en la historia reciente de una frontera binacional que dejó de ser lejana para volverse cercana, accesible y cotidiana.
Desde el aire, el territorio se revela distinto. La frontera ya no se imagina como una línea, sino como una trama urbana compartida, donde Uruguay y Brasil conviven sin rigideces. Rivera y Santana do Livramento se reconocen mutuamente en sus calles, en sus mercados, en su música y en una forma de vida que fluye de un lado a otro con naturalidad.
La nueva ruta cuenta con dos frecuencias semanales, los lunes y miércoles, con salida desde el Aeropuerto de Carrasco a las 19:00 horas y regreso desde Rivera a las 20:45 horas. El tiempo total de vuelo es de 1 hora y 5 minutos, a bordo de aeronaves CRJ-200 con capacidad para 50 pasajeros. Una distancia breve en tiempo, profunda en significado.
Un vuelo que integra territorios
El Ministerio de Turismo participó del primer vuelo, destacando el valor estratégico de esta conexión para el desarrollo turístico, económico y social del norte del país. El ministro Pablo Menoni subrayó el carácter de política de Estado que sostiene esta iniciativa y el trabajo articulado que la hizo posible.
La nueva ruta no solo acerca Rivera a Montevideo, también conecta de forma directa a una región que dialoga con más de cinco millones de personas del otro lado de la frontera. El avión, en este contexto, funciona como un verdadero dinamizador territorial.
Desde Paranair, su gerente general Jaime Casola destacó la importancia de sumar a Rivera como el segundo destino dentro de Uruguay y agradeció la confianza del país, de las autoridades y de los pasajeros. Para la aerolínea, este vuelo representa una apuesta clara por la integración regional.
Diego Arrosa, CEO de Aeropuertos Uruguay, puso el foco en un dato singular: Rivera opera como el segundo aeropuerto binacional del mundo. La concreción de esta ruta, fruto de casi dos años de trabajo conjunto, confirma el valor de una infraestructura pensada con visión de futuro. El Aeropuerto de Rivera había sido inaugurado en diciembre de 2023, luego de una modernización integral alineada con estándares internacionales de seguridad, operación y servicio.
El intendente de Rivera, Richard Sander, remarcó el impacto regional del nuevo servicio y la necesidad de trabajar junto a Artigas y Tacuarembó para consolidar esta conectividad como motor de desarrollo turístico y económico.
Un territorio que se cuenta a sí mismo
Este viaje, realizado con el acompañamiento de la Cámara Uruguaya de Turismo (CAMTUR), permitió descubrir una región que no se explica desde el discurso, sino desde la experiencia directa.
En Rivera, el MUMA —Museo de la Madera— propone un encuentro con la materia y el tiempo. La madera, trabajada por manos diversas, conserva la memoria del árbol y del territorio. Bajo la curaduría de Tamara Cubas, el museo se expande hacia el Bosque Escultórico, donde el arte contemporáneo dialoga con el paisaje. Se trata de un proyecto concebido a cien años, una herencia cultural que confía en el tiempo largo.
Viajar sin apuro, comprender el lugar
Desde Santana do Livramento, el Trem do Pampa avanza hacia Bodega Almadén siguiendo el pulso sereno del campo. La experiencia ocurre en el trayecto, en la conversación compartida y en la observación del paisaje abierto.
Durante ese viaje surgió un momento imposible de planificar. La artista fronteriza Nicole Carrión tomó una guitarra y comenzó a cantar. Su voz convirtió el vagón en un espacio íntimo. Afuera, el campo continuaba su ritmo. La frontera, por un instante, se volvió música.
Por Jacobo Malowany para CIPETUR

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